Si bien muchos están seguros de que la vacunación generalizada es la clave para la recuperación, otros advierten que los efectos en los viajes serán mínimos en la primera mitad de 2021
A pesar de crear una oleada de optimismo global, la llegada de la vacuna COVID-19 hasta ahora se ha distribuido lentamente en varios países. Si bien muchos están seguros de que la vacunación generalizada es la clave para la recuperación, otros advierten que los efectos en los viajes serán mínimos en la primera mitad de 2021. La mayoría de los gobiernos están dando prioridad a los profesionales de la salud, los trabajadores de primera línea, las personas de edad avanzada y aquellos con comorbilidades. Es posible que los viajeros no tengan acceso a la vacuna hasta finales de este año.
A pesar de la distribución lenta y variada de la vacuna, será un factor significativo en la decisión de más de 6 de cada 10 empresas de reanudar los viajes, según una encuesta reciente de GBTA.
La inmunidad “colectiva” es el objetivo final, pero lograrlo a escala mundial llevará tiempo. Si bien muchos países pueden lograrlo durante 2021, otros no lo harán, lo que complica aún más las políticas de control fronterizo. El principal experto en enfermedades infecciosas de Estados Unidos, El Dr. Anthony Fauci, ha indicado que es posible que la vacuna COVID-19 se convierta en un requisito para viajar. Para aclarar, el requisito emanaría no a nivel federal, sino de instituciones privadas – como hospitales – o en este caso proveedores de servicios en el sector turístico. Por ejemplo, Qatar Airways ha anunciado planes para introducir tal requisito, y algunas de las líneas de cruceros más grandes del mundo están explorando la legalidad de que las vacunas COVID-19 sean obligatorias para los pasajeros.